Es tan motivante que me deja con ganas de estudiar derecho y trabajar encerrando chicos malos y haciendo que ocurran milagros.
Pero espera, Yo trabajo en un hospital salvando chicos bueno (o a la espera de una 2a oportunidad para serlo, quiero pensar) y haciendo que ocurran milagros tambien.
Los verdaderos gladiadores usan ambo.
¿Hay algo más milagroso que combatir la muerte? Ver un grupo de personas perfectamente organizados para sacar a un desconocido de un paro cardiaco te hace pensar que una jeringa es mucho más poderosa que una espada o lanza.
Y la lucha no es sólo contra las enfermedades. El sistema agotador, la falta de insumos, la escasez de personal, los mismos pacientes que a veces no se dejan ayudar...
Les sacaría fotos, pero no me atrevo a vanalizar algo tan heroico.
Mis respetos a todos los que trabajan en Salud Pública y combaten en arenas más incomodas que el circo romano uniformados con estos ridiculos piyamas
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