También las rosas son ingenuas y dulces, pero quizá sepáis que en una guerra de dos rosas murieron príncipes que eran como rayos negros, cegados por pétalos de sangre

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viernes, 5 de junio de 2015

Confesiones delirantes

Ya falta menos para terminar mi Internado Rotatorio de Pregrado. Y por fin estoy en pediatría, que considerando que era lo que más me interesaba lo dejaron para el final (o esa fue la excusa del Docto que me organizó el calendario).
Y durante el mes que pasé en recepción trabajé igual que un residente de primer año (sin las guardias obligatorias, sin que me exigieran tanto los superiores y con más supervisión, claro): di altas, hablé con las madres, saqué sangre (toda una vampi pediatrica) y la mejor parte de todas, en mi opición, recibí bebés.

Es un cliché decir que es lo más emocionante que puede suceder. Pero es la única descripción posible. Ver de primera mano el milagro del nacimiento. No importa cuantos partos viera en el día, todos me emocionaban. El acercar al recién nacido a su madre para presentarlos por primera vez, sentir la emoción de los padres, cargar a una personita a los minutos de nacer, asegurarte que estuviera bien. Fue hermoso.

Con el paso de las semanas tomé más confianza, me movía con más soltura y menos pánico y empecé a agregar mi toque personal: no es una responsabilidad menos darle la bienvenida al mundo a otro ser humano, así que quería hacerlo bien. Trataba de saber con anticipación el nombre que le habían escogido, saludarlo con cariño mientras lo vestíamos y en algún momento a solas les asignaba su misión en el mundo.
Todos necesitamos un propósito, una misión que nos oriente y conduzca. Y nunca es demasiado temprano para adquirirla, incluso si muchos piensasn que un bebé de menos de una hora de vida es muy joven para entenderla.
Espero que en algún momento se demuestre que tengo razón y esas personitas puedan cumplir la misión que les asigné:
"Deber ser una buena persona. Estás aquí para hacer del mundo un lugar mejor. Espero que siempre te rodee el amor y puedas compartirlo con quienes conozcas"
Vamos a cambiar el mundo, lo sé... o al menos no me cansaré de intentarlo